
El ayuntamiento debe proponerse vencer esa desidia paralizante y conseguir que la ciudad mire al futuro en grande, como es en realidad lo que el futuro vaticina.
Tomar ejemplo de Barcelona (aunque es una ciudad que detesto); Desde el proyecto de Cerdá en el siglo XIX, la ciudad no ha parado de seguir sus directrices; todavía se derriban ruinas y se prolongan vías de acuerdo a aquel proyecto.
LA ALAMEDA DEL GUADALMEDINA Y LA AVENIDA PARQUE DEL AVE NO SON COSA DE UN DÍA; LA CIUDAD TIENE QUE IMPLICARSE DURANTE VARIOS AÑOS.

No hay comentarios:
Publicar un comentario