martes, 9 de junio de 2015
EL MÁLAGA FC, NEGOCIO AZUL, AZUL OSCURO, CASI NEGRO.
El jeque fue acogido como un mecenas y se le ha
tratado como tal. Hasta se le ¡ha dedicado una importante glorieta! y todos
recordamos con desazón la foto de su visita al ayuntamiento, cuando cometió la
incorrección de llegar tarde y, sin embargo, se apropió del centro de la foto,
desplazando al alcalde a un extremo.
Todos estos años nosotros hemos discrepado de esa
imagen idílica. Desde el comenzó, se notó demasiado que el jeque venía a hacer
negocios. La Bajadilla, lo que pudiera resultar en Arraijanal y los seis
rascacielos de 30 pisos que siempre han afirmado que quería construir en la
Rosaleda. La Bajadilla parece el cuento de nunca acabar, en Arraijanal se ha
demostrado que el ayuntamiento de Málaga ha dejado de ser autónomo y sus
competencias han sido invadidas por completo por la junta tercermundista, y lo
de la Rosaleda, cuanto más tiempo pasa parece menos posible.
Dicen los periódicos que el jeque se resiste a
vender a pesar de la espectacularidad de los 85 millones. Aparte del tira y
afloja de todo comerciante para obtener mejor precio, da la impresión de que el
jeque considera al Málaga ahora un juguete para su “principito” heredero (y por
eso se habría fugado el anterior vicepresidente).
AY MÁLAGA, MÁLAGA.
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